viernes, 6 de julio de 2007

6 oriente

era temprano, y de regreso al hogar me di cuenta de la sencillez y lo hermoso que puede ser un momento.

el hombre mayor limpiando su entrada, el sonido de los cohetes explosivos festejando quizá algún santo de alguna iglesia vecina, el camino de tierra despejado, el planear de los pájaros esos que parecen cuervos, el perro lamiendose sus partes, el aroma a excremento de vaca y gallinas, el viento en mi rostro y que revuelve mi cabello, el poco sol que no deslumbra, a mi derecha los campos de cultivo casi todos verdes y creciendo... pocos árboles que guían mi camino, a mi izquierda la base de la "piramide" de Cholula y personas recibiendo energía, niños jugando fut, animales pastando en el campo.

todo era mágico, veía todo con felicidad, todo en orden y bonito, no había "caos", me sentía bien y disfrutaba de lo poco, lo típico por aquí que aún esta intacto al desarrollo urbano.

muevo mi cabeza levemente de arriba a abajo para saludar a otro hombre mayor que, me dice algo y no escucho por los audífonos, le doy los "buenos días", le sonrio y sigo el camino a mi hogar.

The Mars Volta sigue sonando pero ahora se mezcla con el ruido del camión, las voces, los ruidos de hombres trabajando y golpeando metales, el auto, la tele, niño jugando, mis llaves.

inicia el día.

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